Sin Diego A. Manrique, nuestra percepción de la música pop sería distinta. Desde las páginas de la prensa o los micrófonos de la radio, ha ido construyendo, año tras años, un paisaje sonoroque forma parte de la biografía sentimental de muchos españoles.La síntesis de su trabajo que se recoge en Jinetes en la tormenta nos conduce por el latido de la música negra, desde Wilson Pickett a Michael Jackson, evoca el ritmo abrasador del rey del soul Otis Redding, se detiene en gigantes del jazz como Billie Holiday o Miles Davis, nos devela los secretos de malditos como Syd Barrett, el genio de Pink Floyd, la desdic ...